Beneficios de la Fruta de Hueso
A la que empieza el verano, damos la bienvenida a la temporada de la fruta de hueso. Este tipo de fruta se caracteriza por su frescor, sus colores llamativo anaranjados y su sabor dulce.
Nuestras favoritas son los melocotones, los albaricoques, los nísperos y las ciruelas, pero hay una inmensa variedad.
Son frutas ricas en fibra, vitaminas, antioxidantes y minerales. Son ideales para llevar a la oficina, de excursión, a la playa, a la piscina o para picar entre horas en cualquier momento ya que ayudan mantenernos hidratados y son fáciles de comer.
Queremos compartir con vosotros los 7 beneficios principales de la fruta de hueso
1. Refuerzan el sistema inmunológico
Este tipo de frutas están repletas de vitamina C, antioxidante que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, estimulando a producción de glóbulos blancos para combatir infecciones y enfermedades.
2. Cuidan la salud de la piel
También son ricas en vitamina A, que es el elemento que probablemente más contribuya a mantener la piel sana y ayudar al bronceado natural, ya que favorece el desarrollo de pigmentos en la piel.
La vitamina C también juega un papel fundamental en la creación de colágeno que ayuda a mantener la piel sana, resistente y flexible.
3. Son buenas para la vista
AL igual que pasa con las zanahorias, se debe a su contenido de carotenoides, un precursor de la vitamina A, esencial para mantener una buena salud ocular. El color anaranjado de los melocotones, las nectarinas y los albaricoques se debe a estos. Son unos antioxidantes que ayudan a fortalecer las membranas de la piel y la función inmune de esta.
Esta sustancia se reafirma al cocinar la fruta, por lo que, de vez en cuando, apuesta por cocinarla.
4. Fortalecen la salud de nuestros músculos y nervios
Contienen mucha fibra, que contribuye a reducir los niveles de colesterol y así protegernos y regularnos la presión arterial. También tienen alto contenido de potasio, lo que ayuda a mitigar el cansancio y la fatiga.
5. Promueven nuestra salud digestiva favoreciendo la digestión
Como hemos comentado en el punto anterior, por su alto contenido en fibra, las frutas de hueso también promueven la regularidad intestinal, reduciendo así el riesgo de problemas estomacales, hemorroides y manteniendo más tiempo la sensación de saciedad.
Es importante comentar que la mayor cantidad de fibra está en la piel de la frutas, por eso es importante lavar bien el producto y comerse la pieza entera.
6. Favorecen la relajación y la conciliación del sueño
Algunas frutas de hueso son ricas en melatonina, el subproducto de la serotonina y se utilizan para inducir y ayudar a conciliar el sueño. También ayudan a reducir los sentimientos de ansiedad y nervios, relajando el cuerpo.
7. Fortalecen huesos y dientes
Además de vitamina A y C, también poseen vitamina K. Esta vitamina juega un papel vital en el mantenimiento de los huesos y los dientes sanos y fuertes, ayudando así a reducir el riesgo de caries y enfermedades óseas.